Ayúdenos a pedirle a la Junta de Educación de la Ciudad de Baltimore que convierta toda su flota de autobuses contaminantes de diesel a autobuses escolares eléctricos sin emisiones.
El Problema:
La ciudad de Baltimore utiliza casi 225 autobuses escolares diésel para transportar a unos 5,500 niños cada día escolar. Estos autobuses emiten contaminantes peligrosos que agravan el asma y aumentan el riesgo para toda la vida de padecer cáncer y enfermedades cardíacas. El 20% de los niños de Baltimore tienen asma — el doble de la tasa nacional.
La contaminación por diésel también se ha relacionado con calificaciones más bajas en pruebas escolares y un peor rendimiento académico.
Un niño que viaja en un autobús escolar diésel puede estar expuesto hasta 15 veces el nivel de escape tóxico de diésel que alguien que viaja en un automóvil. Para los niños Latinos y Afroamericanos, que tienen más probabilidades de tener asma que sus compañeros blancos, viajar en autobuses escolares diésel es especialmente perjudicial.
LAS BUENAS NOTICIAS:
La Agencia de Protección Ambiental de EE.UU. (EPA) acaba de anunciar que las Escuelas Públicas de la Ciudad de Baltimore recibirán más de $9 millones para comprar 25 autobuses escolares eléctricos. Sin embargo, la ciudad necesita convertir todos sus autobuses escolares a eléctricos, y nuevas oportunidades de financiación podrían apoyar esta conversión — con su ayuda. Pídale a la Junta de Educación de la ciudad de Baltimore que convierta toda su flota a autobuses eléctricos y aproveche todas las oportunidades de financiación para garantizar que suceda lo más pronto posible.
Los niños se beneficiarán con este cambio a autobuses escolares eléctricos de cero emisiones a través de:
- menor exposición a la contaminación del aire.
- menos inflamación pulmonar.
- menos ausentismo y mejor rendimiento académico.
Los niños de Baltimore tienen derecho a respirar aire limpio. Los autobuses escolares contaminantes de diésel ponen en peligro a nuestros niños mientras reciben su educación.
El 20% de los niños de Baltimore tienen asma — el doble de la tasa nacional. ¡Los niños de Baltimore se merecen aire limpio!
Firme nuestra petición de Autobuses Limpios para Niños Sanos para pedirle a la Junta de Educación de la Ciudad de Baltimore que convierta toda su flota a autobuses escolares eléctricos y aproveche todas las oportunidades de financiación disponibles.
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Help us make a difference by asking the Baltimore City Board of Education to transition its entire school bus fleet to electric buses.
The Problem:
Baltimore city uses nearly 225 diesel school buses to transport about 5,500 children every school day. These diesel school buses emit dangerous pollutants, aggravate asthma, and increase lifetime risk of cancer and heart disease. Twenty percent of Baltimore’s children have asthma. This is double the national rate.
Diesel pollution has also been linked to lower test scores and worse academic performance.
A child riding in a diesel school bus may be exposed to up to 15 times the level of toxic diesel exhaust as someone riding in a car. For Black and Latino children, who are more likely to have asthma than their white peers, riding in diesel school buses is particularly harmful.
THE GOOD NEWS:
The U.S. Environmental Protection Agency (EPA) just announced that Baltimore City Public Schools will receive more than $9 million to purchase 25 electric school buses. But the city needs to transition all its school buses to electric, and new funding opportunities could speed that transition — with your help. Tell Baltimore City’s Board of Education to transition its entire school bus fleet to electric school buses & take advantage of all funding opportunities to ensure it happens as quickly as possible.
Kids will benefit from switching to zero-emission school buses through:
- less exposure to air pollution.
- less pulmonary inflammation.
- lower absenteeism & better test scores.
Baltimore’s children have the right to breathe clean air. Polluting school buses endanger our kids as they pursue an education.
20% of Baltimore’s children have asthma — double the national rate. Baltimore City’s School Kids Deserve Clean Air!